Un modelo de presente y futuro

Jaime Corderas | Presidente de Ecotic

“Ante un contexto de cambio y transformación, no exento de incertidumbres y complejidades, el papel que desempeñan los Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) es fundamental para lograr la transición hacia un modelo de economía circular”

Esta es la primera oportunidad que tengo para dirigirme a todos vosotros como nuevo presidente de Fundación Ecotic. Un cargo en el que relevo a Javier Cervera, quien durante los últimos dos años ha sido el máximo representante del Patronato de la entidad. Su dilatada trayectoria en el sector de la electrónica de consumo y su compromiso con la sostenibilidad ambiental han aportado un enorme valor añadido para la consolidación del crecimiento de Ecotic en estos años. En nombre de todo el Patronato y del equipo de la Fundación, quiero mostrarle desde estas líneas nuestro agradecimiento por su dedicación al proyecto.

 

Asumo la presidencia coincidiendo con el 15º aniversario, en el que se ha alcanzado un nuevo máximo histórico en los resultados de gestión que ha superado las previsiones para el ejercicio. Sin embargo, la crisis originada por la COVID-19 plantea un escenario inesperado y complejo que demandará una revisión de numerosos aspectos a fin de asegurar la continuidad de la industria de los electrodomésticos, uno de los grandes motores económicos de Europa.

 

Deberemos, por tanto, permanecer atentos a la transposición de la Directiva Marco de Residuos, que introducirá modificaciones de la vigente Ley 22/2011 de residuos y suelos contaminados, y que, juntamente con la modificación del Real Decreto 110/2015, conllevará una actualización del régimen jurídico de producción y gestión de los residuos, delimitando las obligaciones de productores y gestores.

 

En este sentido será necesario analizar la evolución de los requisitos mínimos generales de Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), pues son precisamente los productores quienes deben aportar medidas financieras y organizacionales que deben modularse según las tipologías de productos y desarrollar el concepto de ‘ecomodulación’, por el que se busca recompensar los esfuerzos en el diseño de productos que contribuyan a preservar el medio ambiente y a la economía circular.

 

En sintonía con esta evolución, y pese a las dificultades coyunturales, la industria deberá seguir impulsando la innovación e incorporando el ecodiseño como un elemento irrenunciable. Innovación enfocada al desarrollo de medidas orientadas a facilitar la reparación y el reciclaje, minimizar el uso de los recursos, mantener el uso de los productos durante el mayor tiempo posible, y reintroducir los residuos como materiales secundarios en el modelo productivo.

 

No obstante, este esfuerzo no será fructífero si no viene acompañado por políticas públicas acordes con dicha evolución y sensibles a las dinámicas del mercado. El debate sobre el modelo de gestión y el establecimiento de unos objetivos de recogida realistas y adaptados a la idiosincrasia de los aparatos es un aspecto central para el desarrollo presente y futuro del sector.

 

También será fundamental seguir forjando alianzas con la distribución, que, por su acceso privilegiado al residuo y a los consumidores, se erige como un actor clave para la correcta canalización de los residuos, y que, como veremos más adelante en esta memoria, es ya una de las principales vías de recogida.

 

En este contexto de cambio y transformación, no exento de incertidumbres y complejidades, el papel que desempeñan los Sistemas Colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) es fundamental para lograr la transición hacia un modelo de economía circular. Y en este sentido, el compromiso y la profesionalidad de todo el equipo humano de Ecotic son una garantía de solvencia contrastada para lograr avanzar hacia la sostenibilidad del modelo productivo y del medio ambiente.